Hace un mes y medio, recibí una triste noticia, la hija de unos buenos amigos, que llevan toda su vida dedicada a ayudar a los demás, se fue directamente al cielo.
Al enterarme de su pérdida, fui a darles un fuerte abrazo, primero se lo di a él y cuando me acerqué a ella… no sabía que decirle, sólo que supiese que estaba ahí y que me tenía para lo que humildemente le pudiese ayudar, pero desgraciadamente en ese momentos pensé que poco podía hacer…
Mi sorpresa fue su reacción, ella me agarró de las manos y me dijo “Pichón, Anita quería que sus ahorrillos se destinaran al #RetoPichón2017”, ¡nos fundimos en un abrazo! Se me escaparon algunas lágrimas…
A ella, no la llegué a conocer en persona, pero conociendo a sus padres y la cantidad de personas que la querían, tenía que ser una persona muy muy especial.
Solo tengo palabras de agradecimiento, esto es uno de los regalos que te da la vida y que tantos estoy recibiendo en esta lucha con el #RetoPichón.
Cuando decides ayudar a alguien nunca te imaginas lo que puedes llegar a recibir, las personas tan buenas que puedes llegar a conocer ¡Es brutal! ¡muchísimas gracias!
Tenía muy claro que esto no podía quedar en un hecho, a las semanas de esto, Anita ya estuvo presente en el medio ironman de Lisboa, yo sé que estuvo y que me ayudó y también tengo muy claro que va a estar y estará muy presente siempre en mi #RetoPichón.
Me siento muy afortunado de poder decir que tengo una donante que me cuida desde el cielo.
¡Muchísimas gracias Anita!